Friday, March 16, 2007

Dios cumple su palabra



Lo que Dios dice, se cumple.
El pueblo del Señor no depende de circunstancias humanistas ni en sus obras,
Nuestra razón de ser está edificada sobre la Roca, Jesucristo.

"Sécase la hierba, marchítase la flor;
mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre." Isaías 40:8.

En el corazón de David hubo una ferviente esperanza de construir un templo
para Jehová, y el Señor vió esa propuesta con agrado,
pero no estaba en su voluntad que el dulce cantor de Israel
lo honrara de esa manera.

"Pero tú no edificarás la casa, sino un hijo que saldrá de tus lomos,
él edificará casa a mi Nombre." 1 Reyes 8:19.

Dios reservó la bendición para el Rey Salomón,
así lo dijo y cumplió.

En el tiempo de Dios,
Salomón levantó casa para morada de Adonai.

En la dedicación del templo Salomón dijo,
entre otras cosas, lo siguiente:
"Y Jehová ha cumplido su palabra que había dicho;
porque yo me he levantado en lugar de David mi padre,
y me he sentado en el trono de Israel,
como Jehová había dicho,
y he edificado la casa al Nombre de Jehová Dios de Israel."
1 Reyes 8:20.

Dios cumple su palabra,
David expresó "Encomienda a Jehová tu camino,
Y confía en él, y él hará." Salmo 37:5.

Eso hicimos nosotros,
esperamos en su tiempo, y nos dió el templo,
el que ustedes observan en la foto.

Jehová ha cumplido su palabra que había dicho
al Remanente Maranatha
,

A DIOS SEA LA GORIA, AMÉN.

Congregación Maranatha
15 South Main Street
Uxbridge, Massachusetts, U.S.A.

Tuesday, March 13, 2007

El pan vivo que descendió del cielo

Dios es amor y cualquiera sea la circunstancia en que nos encontremos debemos recordar que los seres humanos fuimos creados a imagen y semejanza de Dios, que su amor ha sido derramado en nuestros corazones por medio del sacrificio de Jesús al vertir su preciosa sangre para redimirnos de la esclavitud del pecado y de la muerte.

"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga
vida eterna." San Juan 3:16.

Jesucristo es el camino al Padre, el cordero de Dios que quita el pecado del mundo, el único mediador entre Dios y los hombres, la dádiva de Dios
que nos guía hacia la vida eterna, "el pan de vida que desciende del cielo,
para que el que de él come, no muera." San Juan 6:50.

en este mundo dominado por una extrema violencia familiar y falta de entendimiento Cristo dice:"He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno
oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo".
El APOCALIPSIS 3:20.

Invita hoy al Rey de Reyes y SEÑOR de SEÑORES a cenar contigo,

¡Abre tu puerta!

Su última proclamación de amor para hospedarnos en su Alcoba Celestial se Encuentra en El APOCALIPSIS 22:17,

"Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven.
Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome
del agua de la vida gratuitamente."

MARANATHA,

CRISTO TE AMA.

Friday, March 9, 2007

Que sean uno

"Que sean uno, Padre, como Tú y yo somos uno…"… un
ruego que salió desde lo hondo del corazón de Jesús.

Un anhelo profundo. Sin embargo, cuan distantes nos
encontramos muchas veces los seguidores de Cristo, las
Congregaciones, los cristianos…

Unidad, un desafío para cada iglesia y cada creyente.
Un aspecto esencial en la vida y fundamento del
progreso de una nación.

Somos del parecer que menospreciar la unidad es
menospreciar el porvenir de la humanidad.
No es posible la paz ni la convivencia común y plácida sin unidad,
en su ausencia hasta el futuro se torna incierto y fugaz.

Sin ese terreno frondoso, el de la unidad,
se diezma el acervo de una
sociedad, no hay acuerdos ni compromisos, no hay
posibilidad de bienestar duradero. Unidad que,
aclaramos, no significa negar la diversidad, riqueza
que el Espíritu Santo pone a nuestra disposición para
permanecer en un solo cuerpo.

Tengo fe en que Dios levantará la bandera de la unidad
en la humanidad y que dejaremos a un lado los caminos
de la discordia y la volubilidad.

El profeta Amós preguntó: ¿Andarán dos juntos, si no
estuvieren de acuerdo?

Jesús, en una ocasión, habló
sobre la importancia de la unidad, diciendo: "Además
les digo que si dos de ustedes en la tierra se ponen
de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan, les será
concedida por mi padre que está en el cielo".
(San Mateo 18:19).

Pablo, un apóstol que tendió un puente entre
judíos y gentiles, nos dice: “Esfuércense por mantener
la unidad del Espíritu mediante el vínculo de la paz."
Y añade: “De este modo, todos llegaremos a la unidad
de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a una
humanidad perfecta que se conforme a la plena estatura
de Cristo" (Ef 4,3.13).

Cabe siempre una pregunta: Unidad… en torno a qué o en
torno a quién? Y cabe una sola respuesta verdadera:
JESUCRISTO, LA ESPERANZA DE GLORIA.

Shalom,
Sea la Paz.

Thursday, March 8, 2007

Un camino más excelente

La envidia es un sentimiento que envilece, es el zafacón de la codicia, la esclavitud del egoísmo, bandera del resentimiento, identidad de la deshonra y pasaporte de la rivalidad y la división, es tripulación que va distribuyendo sus mercancías llenas de veneno mortal a todo lugar.

Sus escaramuzas son conocidas por doquier, en centros de trabajos, escuelas, comunidades, universidades, oficinas, palacios, políticos, actividades que impulsan el arte en todas sus exposiciónes, naciones, deportes, en fin, donde quiera deja marcas y huellas.

Cuando se aposenta en la conciencia, la persona nunca es ecuánime, nunca actúa con equidad ni justicia, nunca se humilla y siempre es incapaz de perdonar.

Refiere martín alonso: “La envidia, polilla del talento, lleva el Sello diabólico en su origen”. Satanás es la fuente donde nace la envidia, es él quien la hace brotar de lo mas profundo del corazón humano, desde el principio se encargó de sembrar la semilla del odio y destrucción.

Don Quijote expresó: “Oh, envidia, raíz de infinitos males y carcoma de las virtudes. Todos los vicios, Sancho, traen un no sé qué deleite consigo; el de la envidia no trae sino rencores y rabias!”. No hay dudas de que la envidia es expresión y obsesión del hombre mediocre y una de las inmundicias de las obras de la carne.

Ante un camino sombrío, el de la envidia, Dios nos muestra la luz verdadera en Cristo, y nos extiende la invitación a lo que EL llama "un camino más excelente", el fruto del Espíritu: “Amor, Gozo, Paz, Paciencia, Benignidad, Bondad, Fe, Mansedumbre, Templanza”.

Quien recibe a Cristo se convierte en más que un vencedor, y los que son de él no son envidiosos, porque como dice el Espíritu Santo por medio del Apóstol Pablo, han crucificado la carne con sus pasiones y deseos’’. Gálatas 5:22-24.

Maranatha