Sunday, February 15, 2009

¿Somos o no somos cristianos? / Por Vilma de Rojas

¿Por qué nos suceden ciertas cosas aún siendo cristianos?1 Juan 2:6 nos dice"El que dice que permanece en él, debe andar como El anduvo".

Los cristianos deberíamos prestar más atención a las verdades y mandamientos bíblicos para no violarlos.

Porque desde que nos salimos del paraguas de protección divina, comienza a sucedernos cosas negativas.

1 Juan 2:4 dice "4El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él; "Hay muchos cristianos (entre comillas) traspasando los linderos establecidos por Dios, haciendo caso omiso a las advertencias divinas, pasando por alto las enseñanzas del maestro al cual profesan seguir.

Congregándose por la costumbre de hacerlo, religiosamente, sin reparar que nuestra integridad como cristianos se ha resquebrajado.Me temo que muchos hayan caído de la gracia por el pecado.* Revise su vida diariamente* Y no se duerma en los laureles* Confiese sus pecados al Señor antes de dormir.

Cada día podemos mejorar:* Nuestra oración* Nuestra comunión* Nuestra relación con Dios.

La indolencia ministerial acarrea quebrantamiento. No te acostumbres, no seas indiferente a la obra del Espíritu Santo en medio de la iglesia.

"Sé diligente en conocer el estado de tus ovejas" Proverbios 27:23.

Revisa tus pensamientos, no debemos aceptar toda la basura que el diablo quiera poner en nuestra mente.

Se calcula que cada día nuestra mente genera más de diez mil pensamientos.

Albert Einstein afirmó: "Se necesitan diez pensamientos positivos para cancelar uno negativo".

La Biblia nos dice: "Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él" Proverbios 23:7.

Mi mente es: ¿La mente de Cristo o el taller de Satanás?

Lleva cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo (en contra de tu esposo(a), de tu hermano (a), duda, adulterio, fantasías sexuales, pensamientos pornográficos, etc.)

Vigila tus decisiones si ellas no se adaptan a la voluntad de Dios, o no están de acuerdo a su Palabra, ni tienes que consultar ni orar por ello. En estos tiempos necesitamos milagros económicos, bendiciones extras pero ¿Cómo la obtendremos, si no actuamos bajo parámetros bíblicos?

Queremos beneficios de parte del Señor pero viviendo en lo natural, (actuando en la carne) esto es imposible porque Dios no bendecirá lo que él aborrece.

Esta anécdota nos dice el peligro de las zorras pequeñas.Una pareja viajaba por una de las carreteras de los Estados Unidos, de pronto vio un bulto a la distancia.

El conductor aminoró la velocidad y se dio cuenta de que era una señora con un letrero en la espalda, que iba caminando al lado de la calzada.

Tuvo que detenerse para leer el letrero dándose cuenta que la doctora Moore, venida de Inglaterra, que estaba recorriendo el país a pie, desde San Francisco hasta Nueva York, en un viaje de buena voluntad.

Esta pareja, como el resto del país, siguió escuchando las noticias con interés, para conocer el resultado final de la marcha.

Cuando la doctora Moore llegó a la ciudad de los rascacielos, fue al edificio de la Naciones Unidas donde la asediaron reporteros y curiosos.

Uno de los periodistas le preguntó cuál había sido su mayor problema en esa travesía, esperaba como respuesta: atravesar el desierto, subir las montañas rocosas, el problema del tránsito, los peligros del camino, etc. Pero todos se quedaron estupefactos con lo que dijo: "Mi mayor problema fueron los granitos de tierra que se metían en los zapatos y me molestaban al caminar" Bien dice la Escritura en Cantar de los cantares 2:15: "Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas;".

Hay que cuidar los simples detalles que pueden engendrar grandes efectos.

Si a ti o a mí nos llevaran ante un juez acusado de ser cristiano:¿Habría suficiente evidencia en nuestra contra para condenarnos?¿O fueran estas tan insuficientes que no se sabría lo que fuéramos?

La autora es pastora.

Friday, February 13, 2009

Divisiones en las Iglesias

Hay algo que se cuestiona en materia de religión, y es las tantas divisiones a la que está sometida la Iglesia del Señor, que es solo una.

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