¿Qué es el cinismo?
El diccionario lo define así: Es desvergüenza en el mentir, con la defensa práctica de acciones o doctrinas vituperables.
Al cínico le da lo mismo usar la verdad o la mentira para denigrar o calumniar al otro.
El cínico es soberbio, y se cree de manera desvergonzada el más grande, el centro y el sabio del mundo.
De él, dice la escritura en el libro del Eclesiástico: “No corras a curar la herida del cínico, que no tiene cura, es brote de mala planta”.
El cínico se burla de todo, de manera solapada o abiertamente, de tal manera que el cínico siempre hace daño.
Hay que aprender a cuidarse de los cínicos, y no esperar que puedan cambiar, porque los cínicos hieren mucho y no les importa la verdad, ni a las personas, ni al individuo.
Aprendamos a descubrir a los cínicos, evitemos ser cínicos, huyamos del cinismo, y aprendamos de la escritura, a que el cínico hace mucho daño, y él se cree invulnerable, pero termina a la corta o a la larga de manera vergonzosa, porque el cínico no tiene vergüenza, pero termina siendo él mismo despreciado, por la manera de ser y la manera de actuar en su vida.
Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.
Ramón Benito De La Rosa Y Carpio
Fuente
Listín Diario
El diccionario lo define así: Es desvergüenza en el mentir, con la defensa práctica de acciones o doctrinas vituperables.
Al cínico le da lo mismo usar la verdad o la mentira para denigrar o calumniar al otro.
El cínico es soberbio, y se cree de manera desvergonzada el más grande, el centro y el sabio del mundo.
De él, dice la escritura en el libro del Eclesiástico: “No corras a curar la herida del cínico, que no tiene cura, es brote de mala planta”.
El cínico se burla de todo, de manera solapada o abiertamente, de tal manera que el cínico siempre hace daño.
Hay que aprender a cuidarse de los cínicos, y no esperar que puedan cambiar, porque los cínicos hieren mucho y no les importa la verdad, ni a las personas, ni al individuo.
Aprendamos a descubrir a los cínicos, evitemos ser cínicos, huyamos del cinismo, y aprendamos de la escritura, a que el cínico hace mucho daño, y él se cree invulnerable, pero termina a la corta o a la larga de manera vergonzosa, porque el cínico no tiene vergüenza, pero termina siendo él mismo despreciado, por la manera de ser y la manera de actuar en su vida.
Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.
Ramón Benito De La Rosa Y Carpio
Fuente
Listín Diario
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